Su tarea era la de portar la bandera, que representaba la propia persona del rey, y el alma misma de la compañía, siendo una deshonra el perderla en la batalla.
Sin embargo, el alférez solía disponer de un sotalférez que portaba la bandera durante la batalla o durante la marcha, pero no durante las revistas de la compañía .
Durante la batalla el alférez solía ocupar puestos de combate en las primeras líneas, o algún puesto organizativo en una de las mangas, pero en ocasiones mantenía la bandera en lugar de cederla al abanderado, quedando protegido en medio del cuadro.
La insignia del alférez era la bandera de la compañía, pero cediéndola al abanderado, el alférez servía normalmente con pica y coselete en la primera hilera del escuadrón.
En la ordenanza de 1632 se fijan cuatro años de servicio en guerra o seis de servicio efectivo para poder acceder a la plaza de alférez, quedando a criterio del capitán la elección de la persona para este cargo, no obstante que a partir de este año se fijó como requisito la aprobación del ascenso por parte del Maestre de Campo.
Normalmente los alférez habían sido anteriormente sargento, pero esto era algo que no respondía a un criterio fijo.
La figura lleva pantalón Altaya teñido, camisa festiman, con cuello y puños de encaje cosidos por mi mujer, peto y espaldar modelados con masilla, espada ropera de lazo hecha a mano, botas modeladas con masilla banda roja cruzada como distintivo de infantería española y tahalí para la espada hecho en cuero.
Copia en resina del sombrero de una de las figuras de piratas del caribe y cabeza de Orlando Bloom con añadido de barba y bigote modelados en masilla bicomponente.
Por último la bandera impresa en tela con la impresora del ordenador y cosida también por mi mujer.
Espero que os guste ya que las fotos no eran muy buenas, ya que no había forma humana de encuadrar ese pedazo de bandera.